Ataque de inyección digital

Los ataques de inyección digital son ciberataques sofisticados, altamente escalables y replicables que eluden la cámara de un dispositivo o se inyectan en un flujo de datos.

Los ataques de inyección digital pueden utilizarse para suplantar los sistemas de autenticación y verificación biométrica. Mediante la inyección de ataques de repetición o imágenes sintéticas, incluidas deepfakes, en un flujo de datos, los delincuentes pueden intentar hacerse pasar por un usuario de buena fe y obtener acceso no autorizado a cuentas o sistemas (o crear cuentas nuevas).

Hay muchas formas de ejecutar ataques de inyección digital. Por ejemplo, podrían engañar a la aplicación con una imagen de cámara falsa, o los delincuentes podrían inyectar imágenes en el flujo de datos entre un dispositivo y la organización. 

iProov es el único capaz de detectar ataques de inyección digital, gracias a nuestra biometría de un solo uso y a nuestra tecnología en la nube. Esto significa que tratamos todos los dispositivos como si estuvieran comprometidos, es decir, pirateados o con jailbreak, o infiltrados por un ataque de inyección digital o de otro tipo.